ENTREVISTA a la Montañista argentina Carolina Mourazos: "Mi próximo desafío es hacer las diez montañas más altas de América"
#ConsignasDeMujeres entrevistó a la Montañista Carolina Mourazos quien el pasado 5 de mayo se convirtió en la primer mujer del mundo en realizar un proyecto que incluye subir las 10 montañas más altas de Argentina y la octava persona en lograrlo en una lista que incluye montañistas de todo el mundo, hazaña realizada hasta el momento sólo por hombres.
Cumbre del
Aconcagua Febrero 2012
|
Volcan
Llullaillaco Mayo 2017
|
Cómo nació tu pasión por la montaña?
A los 20 años, hice mi primer curso vinculado a la montaña, de alguna manera quería empezar a hacer algo relacionado con las montañas. Tiempo después, comencé con un entrenamiento más específico con las limitaciones de vivir en una ciudad sin montañas. Y luego realicé un curso de escalada y a escalar por diferentes lugares de nuestro país.
Fue a partir de 2010 que incursioné en el deporte de alta montaña. Inicialmente, con ascensos de 4000 metros, donde sólo buscaba probar mi fortaleza física y mental. Porque en la soledad de la altura, cuando el cuerpo ya no responde, sólo queda la mente. La fortaleza mental es lo único que nos permite superar los retos que la montaña nos presenta día a día. El cansancio extremo muchas veces se alía con la montaña y nos hace bajar los brazos. Ese mismo año escuché hablar por primera vez del desafío de las “10 montañas más altas de Argentina”. No tenía mucha idea cómo llevarlo a cabo y superar los 6.500 metros parecía un poco intimidantes. Sin embargo, estaba decidida a cumplirlo.
Qué destacás de tus experiencias en la montaña?
En cada expedición uno aprende a conocerse, a saber cómo reacciona el cuerpo, que alimentos son mejores que otros, cómo mantener la hidratación (algo fundamental para no sufrir mal de altura) y, lo más importante, a calmar las ansiedades, disminuye la capacidad de pensar con lucidez. Como en todo desafío deportivo, la preparación puede durar años y en el momento de la acción, en tan solo unos minutos, todo puede cambiar: la última palabra siempre es de la montaña. El montañismo es una pasión difícil de explicar. Creo que si no me dedicara a esto, yo tampoco lo entendería. ¿Qué hay de mágico en vacacionar en lugares inhóspitos, a veces hostiles, donde pasamos frio y todo se resumen a esperar: que pare de nevar, que no sople el viento, etc.? La mayoría de las veces viajamos muchas horas a través de caminos inexistentes para llegar al pie de una montaña o caminado hasta 20 km por día, cargamos 20 kilos en la espalda con todo lo necesario para vivir allí arriba por semanas. Todo por esa sensación de plenitud de estar en la cima del mundo, al menos por 5 minutos.
Muchas veces uno se encuentra tomando decisiones difíciles, como cuando algún compañero no se siente bien o el clima no mejora y entonces hay que emprender el descenso. Y será al año siguiente, con otro pedido de licencia por vacaciones. Porque la temporada de ascensos para estas montañas es de diciembre a abril y dado que no hago esto como forma de vida, sólo dispongo de los días laborales para la aclimatación y el ascenso.
Cuándo comenzaste a escalar las altas cumbres?
En el 2012 di el primer paso hace ese gran objetivo y, a la vez, cumplí un sueño que en algún momento me parecía imposible: hacer cumbre en el Aconcagua (6962 m). Luego vinieron el Incahuasi (6.638 m), el Pissis (6.795 m), Walter Penck (6.658 m), Ojos del Salado que es el volcán más alto del mundo (6.893 m), Tres Cruces (6.749 m), Bonete (6.759 m), Tupungato (6.570 m), Mercedario (6.701 m). Finalmente, el Llullaillaco (6.739 m) donde fueron encontradas unas momias incas en perfecto estado de conservación y que actualmente son exhibidas en un museo en Salta.
Cuál es tu próximo desafío?
Hacer las diez montañas más altas de América. Estoy segura que ese no será mi último desafío ni objetivo. Porque cuando la montaña se siente de esta manera, todos los días se piensa en retos nuevos, en soñar cosas grandes y ya al bajar estamos pensando en cuál será la próxima montaña.
ENTREVISTA Ailin Pappano
Comentarios
Publicar un comentario